Vecinos de Sierra de los Padres realizarón una movilización el martes por la tarde para pedir seguridad. Cansados de los hechos delictivos que ocurren en la zona, se manifestarón en las puertas de la Comisaría Decimocuarta.
El peligro dice presente en cada barrio de Mar del Plata y pone en riesgo la integridad y tranquilidad cotidiana de los vecinos. Si bien a esta altura ya no sorprende este matiz, la cantidad de ciudadanos que alzan la voz ante la constante inseguridad en paralelo a la falta de personal policial no para de incrementarse.
Ahora fue el turno del barrio residencial de Sierra de los Padres. En el arco que conecta con el ingreso al barrio se movilizaron más de 60 vecinos con el objetivo de manifestarse ante la increíble cantidad de robos y entraderas que se entrometieron en sus día a día.
Allí los presentes firmaron decenas de papeles destinados al delegado correspondiente y al intendente Guillermo Montenegro. Además, dieron a entender que la estadía en Sierra de los Padres “es un desastre. Hay convivencia con el delito, desde febrero hay más de 10 robos violentos y masivos por semana. Pedimos más seguridad y control de quién entra y quién sale. Hay uno o dos patrulleros que recorren Colinas Verdes, San Carlos y Sierra de los Padres. Claramente no alcanza“, reclamaron.
“Estamos a la deriva. La desidia es total, al igual que la mala praxis de la policía. No hay empatía. Las denuncias las toman de mala gana, nunca hemos encontrado una actitud de ponerse en el lugar del otro, sabiendo la escasez de recursos que existe“, agregaron al unísono.
“A una vecina le rompieron el pómulo en una entradera con sus hijas adentro, es una locura“
En paralelo, detallaron que “las cámaras dejaron de funcionar desde febrero. Acá el COM no existe, no tenemos un servicio de vigilancia, estamos muy desprotegidos, es un desastre, la policía da vueltas inútilmente. Montenegro debería venir y mirar lo que sucede acá“.
“Nos mandan las luces usadas por Mar del Plata, las que cambian por luces led. O que cambien las luces, o que dejemos de pagar impuestos. Esperamos no tener que enrejar las casas, porque esto es un barrio no una cárcel. Los delincuentes tienen que estar tras las rejas, no nosotros“, concluyeron.